![](https://www.gr-cultural.com/catalogue.etac/wp-content/uploads/2015/12/javier-chozas-panacee.jpg)
Centros de arte como contextos: la experiencia de La Panacée
Franck Bauchard
La Panacée abrió sus puertas en junio del 2013. La antigua Escuela Real de Medicina de Montpellier es hoy el resultado de un largo historial de experimentaciones científicas. Como centro de arte, fue creada para dar respuesta a las transformaciones de las prácticas artísticas y culturales, difícilmente clasificables, pues a menudo abarcan distintas categorías. Estas nuevas divisiones son fruto de investigaciones artísticas en los campos de la ciencia y la tecnología.
Los artistas residentes en La Panacée proceden de ámbitos muy diversos: fotógrafos y cineastas, escritores y arquitectos, músicos y diseñadores, artistas escénicos y escultores. Comparten una misma voluntad de ofrecer nuevas visiones y perspectivas que expliquen cómo las tecnologías y la ciencia están rediseñando el individuo y la sociedad; de esta manera el centro se convierte en punto de convergencia y en catalizador para artistas procedentes de distintas disciplinas. La idea es reunir para el público una gran variedad de puntos de vista que converjan en un futuro imaginado de la contemporaneidad. Es por este motivo que La Panacée recibió la denominación de Centro de Cultura Contemporánea.
Por mediación de la ETAC, La Panacée invitó a Javier Chozas, arquitecto interesado en los nuevos soportes artísticos, y a Mireia c. Saladrigues, una artista de las artes visuales que integra las artes escénicas en sus obras. Sus respectivas prácticas interdisciplinarias encontraron de manera natural su lugar en La Panacée, así como un público interesado en las conferencias, el open studio y los talleres. Ofrecer apoyo a un artista es multiplicar los contextos en los que la acción artística puede ser capturada y puesta a debate por distintos tipos de audiencia.
La Panacée fue diseñada para apoyar el trabajo de los artistas ofreciéndoles dos tipos de colaboración: producción y residencia. Cuando pensamos en residencias lo primero que nos viene a la mente es el taller, pero las prácticas evolucionan muy rápidamente. Un gran número de artistas a quienes ofrecimos producción vinieron a La Panacée para trabajar en el contexto de la ciudad. Es el caso de la cineasta Christine Boutellier, que trabajó con investigadores de la Universidad de Montpellier que estudiaban el lenguaje de los SMS y crearon una obra participativa sobre la memoria y la comunicación telefónica. También la artista americana del locative media, Teri Rueb, recopiló distintos datos de la ciudad de Montpellier —botánicos, demográficos, geográficos, de transporte— y se entrevistó con distintos expertos de la ciudad procedentes de un amplio espectro de disciplinas; el resultado fue un mapa dinámico de la ciudad que causó gran impacto y en el que el visitante podía dejar constancia de su recorrido por la ciudad.
El colectivo artístico General Instin, que reúne a escritores y artistas de las artes visuales y del street art, eligió como lugar de trabajo un campamento militar abandonado dentro de la ciudad y recreó su arquitectura en una plataforma web diseñada por La Panacée. Esta residencia combinó distintos contextos en un proyecto que sigue evolucionando: empezó como street art en las instalaciones militares, siguió con un texto que recuperaba la arquitectura del lugar para la plataforma web Textopoly, y, seguidamente, se convirtió en una instalación para «Conversaciones eléctricas», la exposición inaugural de La Panacée. A continuación, se transformó en performance con la acción Conversation factory. Ofrecer apoyo a un proyecto significa acompañarlo en su proceso. A partir de este proyecto, General Instin se apropió de distintos contextos, temporalidades y medios dentro y fuera de los muros de la Panacée, generando un constante proceso de renovación.
«Anatomía del autómata» es la próxima exposición de La Panacée, realizada en colaboración con el MAMCO de Ginebra. Está dedicada a la figura del autómata desde la perspectiva médica de la relación hombre-máquina. La Panacée fue, durante siglos, una escuela de medicina, y esta exposición se exhibirá en el lugar que ocupaba antiguamente el teatro de anatomía. El artista mexicano Eric Beltran, actualmente en la residencia, está trabajando en los archivos de la Universidad de Medicina, punto de partida de su trabajo en La Panacée, en el que artistas crearán performances en el Conservatorio de la facultad de medicina y científicos ofrecerán visitas comentadas por la exposición. La superposición de estratos y los ecos otorgarán sentido a esta obra.
Una institución no se fabrica con materiales de construcción; los centros de arte pueden crear puertas y construir puentes para abrir campos de investigación y transformarlos en contextos artísticos. Crean posibilidades donde se origina la obra. Los centros de arte ofrecen marcos donde se concentra la investigación artística en un diálogo entre espacios, conceptos y contextos. Los centros de arte no son meros espacios organizados alrededor de la circulación de obras de arte, sino metáforas de su contexto donde el arte establece un diálogo con su entorno.